jueves, 11 de octubre de 2018

Ring bells: Hi

Desde el principio, nunca hubo nada más que calma. Un universo en equilibrio. Pero hace muchos años algo provocó una contracción. El deseo de experimentarse. Tantos años que ni las civilizaciones más antiguas pudieron datar el momento. Porque fuimos, somos y seremos ese mismo momento, ayer, hoy y siempre.
Vivir y volver. La fuente misma en su conciencia reducida a una parte de sí misma, un fractal de ella habitándose ella en ella. Experimentándose. 
Tan lejos llegó que olvidó que debía volver, y ahora por primera vez se encuentra con alguien similar a sí misma, que no es nada más que otro fractal de ella. Habitándose y experimentándose en otro sitio, teniendo otras experiencias, otros puntos de vista. Cada una con su verdad. Diferentes pero en esencia la misma e igualmente verdaderas.Una arriba y otra abajo.


La discordia aparece en el tercer fractal y mientras la imparidad le provocó contracciones, la paridad le trajo equilibrio. La falsa búsqueda de la verdad no es más que la búsqueda verdadera del equilibrio que poseía antes de ser consciente.
Una interminable búsqueda en una sopa de vibraciones. Cuando una frecuencia es alcanzada, otra es encontrada. Una ilusoria dualidad y una ilusoria unicidad. 
Más hacer y menos decir. Seamos.